
He de reconocer que no he sido muy fan de las berenjenas hasta hace poco. He tenido que aplicar mi máxima de probar las cosas de otra manera para empezar a cogerles el gusto. Y este abanico de berenjena es una magnífica receta para aficionarse a esta solanácea. Es facilísima de hacer porque quien trabaja es el horno.
INGREDIENTES
Una berenjena (lo idóneo es que sea una por cabeza, no demasiado pequeña).
Un tomate más bien maduro.
Una bola de queso mozzarella (puede ser light).
Aceite de oliva virgen extra.
Orégano al gusto.
Sal.
CÓMO HACERLO
Abrimos la berenjena en abanico dejando unidas las capas a la base (tal y como se observa en la foto). Untamos cada una de las capas con un poco de AOVE (yo usé un pincel de cocina), salamos y espolvoreamos con orégano.
Introducimos entre cada una de las capas un par de rodajas de tomate y otras tantas de mozzarella. Volvemos a espolvorear con orégano si es de nuestro gusto.
Metemos en horno precalentado, fuego arriba y abajo a 200º unos 40 minutos (dependerá de la potencia del horno).
Servimos caliente y a disfrutar de esta casi pizza de berenjena 🙂